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martes, 17 de julio de 2012

Preocupaciones de cara al Tercer Clásico Mundial de béisbol

En la actualidad del béisbol mundial que un equipo pierda dos partidos de manera consecutiva no es nada sorprendente, a menos que el derrotado sea Cuba, porque entonces se ponen todos alertas, dígase, especialistas y los miles de aficionados que hay en el país.
Y es que aquí la pelota es pasión y con el revés aparecen montones de opiniones sobre el tema.

Por estos días se celebra la semana beisbolera de Holanda, que en esta oportunidad se desarrolla en Haarlem, y la selección que comanda Víctor Mesa presenta balance de una sola victoria y par de reveses. El triunfo se alcanzó de manera agónica hoy frente a Taipei de China 2x1 carreras y las derrotas 3x2 ante Puerto Rico y 5x2 a manos de Estados Unidos.

Mi mayor preocupación es que la base de esta novena es la que jugará con el uniforme de las cuatro letras el venidero Clásico Mundial, ahora se ven dominados por lanzadores pocos conocidos, sin importar su estilo de lanzar. Véase que promedian colectivamente un anémico 237 de average y de todo el plantel solo Frederich Cepeda supera la marca de 300, exactamente con 400 (4-10).

Desde la llegada de los peloteros profesionales a los eventos internacionales, el nivel competitivo es muy alto y países de menos tradición son capaces de participar con peloteros de calidad, solo que Cuba se siegue manteniendo en la élite y creo que seguirá estando es ese lugar de honor por mucho tiempo.

Ahora bien, las cosas no están saliendo como quisiéramos ¿por qué?
Razones pueden existir varias ¿Es esta la mejor preparación que podemos hacer para que un grupo de atletas alcance un pico de rendimiento para un certamen de apenas una semana? ¿Hay tiempo para que un grupo de preparadores se ajusten al trabajo deseado? ¿Están todos los peloteros que pueden representar a la nación?

Lo cierto es que año tras año se cambia el director del equipo nacional y con él también varía el grupo de trabajo. ¿Acaso no sabe más el diablo por viejo que por diablo? Entonces es preciso un tiempo de trabajo, juntos, para lograr una cohesión de equipo entre atletas y entrenadores.

Se puede ganar o perder en Haarlem, solo espero que la permanencia de Víctor en el puente de mando no dependa de este resultado.

El tema de los seleccionados también es polémico. Siempre he defendido que debe jugar el que esté bien. Pero nos damos el lujo de dejar fuera de toda preselección a peloteros con basta experiencia esgrimiendo como razón que son veteranos. Hoy se hace difícil encontrar a un segunda base natural tras la lesión de Héctor Olivera pero a nadie se le ocurre llamar a dos colosos como el tunero Dánel Castro y el avileño Mario Vega.  Entonces ¿son elegibles todos los que juegan en la Serie Nacional?

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